SALA:TXOLA
FECHA: 16/12/11
PUBLICO: 200 PERSONAS
ESTILO: Electronicworldmusic for allnigthers
(Afrobeat, Soul, Electrónica, Reggae, D&B, Salda Dura)
Dj Floro empezó pinchando casi de puntillas, tímido, sin atreverse, porque el Txola estuvo vacío a primera hora, y apenas ocupado por pequeños grupos charlando en torno a la barra a segunda. El viernes era el día D para las cenas de empresa y demás reuniones etílico-prenavideñas, así que, aunque tarde, apareció muchísima gente con ganas de mambo. Para entonces ya Floro se encontraba a gusto. Sirvió sus platos especiales a base de Afrobeat, Electrónica, Reggae, Drum&Bass, y sus siempre sorprendentes ingredientes secretos. Colocó en uno de los momentos más inteligentes de la sesión una concatenación de versiones de Fever, que subieron varios grados la temperatura de la pista y demostró varias veces el porqué de su renombre. Si no lo conoces, necesitarás saber que son memorables sus sesiones en La Boca del Lobo de Madrid, o el Afrodisia de Granada, que recientemente visitó el Womad de Las Palmas, que se le reclama para pinchar en capitales europeas como Londres, Berlín y Helsinki, que colabora en Sonideros de Radio3, que ha realizado varias recopilaciones como todas las variantes de Radical Mestizo o los distintos volúmenes de Republicafrobeat, y que por todo eso, y su abultada trayectoria, está considerado uno de los mejores selectores de ritmos bailongos del mundo en nuestro país.
FECHA: 9/12 /2011
SALA: Auditorio Príncipe Felipe, Tegueste.
PUBLICO: 100 PERSONAS
ESTILO: Swing, Jazz Manouche.
PROMOTOR: Ayto. Tegueste.
Arropados por un auditorio cuya madera proporciona una precisa y templada acústica, se presentó Nicotine Swing con su sencilla pero eficaz puesta en escena. Dos guitarras, un contrabajo, un acordeón, una botella de vino y la brillante voz de Tata para combinar clásicos del género (Swing 39, Sweet Sue, Don´t mean a thing) con temas propios (La mitad, El final del mundo, Bien parado) y versiones como deben de ser, adaptaciones interpretadas con personalidad (Ojos Negros, Rascayú, Bésame mucho).
El grupo se mostró engrasado, cómplice y a gusto. La única pega, por poner alguna, fue la disposición de la banda en el escenario. Un micro presidiendo en el centro para que, a cada tanto, apareciera la cantante, enfriándose así su interpretación. A una banda como esta dónde la voz es un instrumento más, a veces secundario, o que desaparece en las instrumentales, no le beneficia ese pie de micro vacío en medio de las tablas, haciendo de menos a los fabulosos interpretes y al divertido maestro de ceremonias en que se transforma el contrabajista J.C. Baeza. A eso de la media noche el público salió encantado tras saborear el primer disco de la banda, los Nicotine jugaban en casa.
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