Por cambiar de sabor
No era tan fácil predecir lo que haría. Una vez me acercó su mano ahuecada y sopló antes de que pudiera ver el contenido. Mientras reconocía la pimienta abrasándome los ojos, me alcanzó un klinex perfumado. Estornudé más de media hora. Sólo cocinaba vegetales. Variaba de rumbo sin previo aviso al caminar por la calle,… Leer más Por cambiar de sabor